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Porsche 917 K
24 horas de Le Mans
McQueen

Porsche 917K: de los circuitos a la gran pantalla

Cuando la historia de Porsche en los circuitos ya era leyenda del automovilismo, su presencia en cualquier evento era casi obligada. Los modelos de carreras Porsche llamaban mucho la atención y eran admirados por todo el mundo. Así fue como el cine se fijo en ellos y llevó a la gran pantalla al Porsche 917. 

Se lanzaron dos modelos del 917: LH para "Lang Heck" y la versión K para "Kurz" (corto en alemán). Aunque la versión LH era ligeramente más rápida, la versión K era más maniobrable en el tramo de carretera con curvas y, sobre todo, bajo la lluvia.

En este vídeo podéis ver la potencia de este modelo que tantas alegrías nos ha dado.

El Porsche 917 fue elegido "El mejor coche de carreras de la historia" por 50 expertos de la revista británica Motor Sport. Con un motor plano de 12 cilindros y 630 CV, podía alcanzar los 386 km/h. En total, el Porsche 917 ganó 17 títulos entre 1969 y 1971. 

No sólo es el modelo que ganó las 24 Horas de Le Mans en 1970, sino que también es este, el Porsche 917K, el que estableció el récord de tiempo del circuito durante los entrenamientos libres del mismo año mientras conducía Brian Redman. 

917K en la película "Le Mans" de Steve McQueen en 1971
 

Con un presupuesto impresionante, que permitió contar con los mejores coches de carreras de la época y algunos de los mejores pilotos, "Le Mans: la película", se hizo rápidamente famosa y puso de relieve las 24 horas de Le Mans, el mismo lugar donde se rodó la película en 1970.

La compañía de producción de Steve, Solar Productions, compró un Porsche 917K, mientras que JWA (John Wyer Automotive) prestó otro. Un tercer coche, el 917-024, fue alquilado a Solar Productions por Joseph "Jo" Siffert, junto con muchos otros coches utilizados en la película. El equipo se encargó de montar las cámaras. Según Forbes, este 917K sirvió de apoyo para los planos en movimiento a lo largo de toda la película.

Una de las características más memorables del 917K fueron sus colores. Como patrocinador, el 917K respaldó los colores de la empresa Gulf Oil. En la película, Steve McQueen apoyó a un piloto del equipo Gulf, pero la verdad es que al actor no se le permitió conducir durante la carrera, a raíz de la negativa de las compañías de seguros.
Esta película muestra la carrera de las 24 Horas y especialmente la pasión, la furia de la carrera automovilística. 

En 1970 y 1971, Jo Siffert condujo el Porsche 917 K y el Porsche 908/3 para el equipo JWA Gulf-Porsche. Ganó cuatro carreras en el campeonato y alcanzó otros 7 podios, a la vez que ayudó a Porsche a ganar el título de mejor fabricante durante 3 años consecutivos.

Porsche 917K: el Porsche más caro del mundo
 

Durante una subasta en California, organizada por Gooding & Company en agosto de 2017, el 917K, propiedad del conductor Jo Siffert y conducido por el actor Steve McQueen, fue vendido a un coleccionista suizo.

Después del rodaje, el 917K volvió al garaje de Siffert. El campeón suizo condujo el coche hasta un trágico accidente en un hipódromo donde murió el 24 de octubre de 1971. Durante casi 25 años, el 917K fue olvidado hasta que los talleres suizos de Graber hicieron una restauración y recuperaron esta antigua gloria. El superdeportivo ostenta el récord de ventas de una subasta de Porsche.

Como parte del evento benéfico Concours d'Elegance de Pebble Beach en Monterrey, el prototipo deportivo de Porsche cambió de manos por la friolera de 14 millones de dólares, ¡lo que representa casi un centenar de vehículos Porsche 911! En realidad, no es tan sorprendente, ya que este coche de carreras ha marcado la historia del automóvil para siempre, ganando la mayoría de las carreras de resistencia en las que ha participado. 

El 917 permitió a Porsche ascender de división y jugar en las grandes ligas. Este modelo facultó a Porsche pasar a la historia y alcanzar la fama mundial. Sin duda ocupa un lugar privilegiado en la historia de Porsche.

Claudio Roddaro, un apasionado Porschista monegasco, también compró un 917K en 2016 por un valor estimado de 22 millones de dólares. Aceptó el reto de matricular su auto para su uso en la calle y ,tras 2 meses de papeleo, lo logró.

Es evidente que, el Porsche 917K, es uno de los modelos más deseados para muchos coleccionistas de coches, simplemente por ser uno de los coches de carreras más grandes del mundo jamás fabricados.

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