Leipzig y Macan, el proyecto eléctrico más ambicioso de Porsche
Ser una marca 100% eléctrica y sostenible es un sueño que estamos cumpliendo. El mejor sitio para fabricar este sueño es, valga la redundancia, la fábrica de sueños personal de Porsche: Leipzig.
Leipzig es una obra maestra. Enclavada en un paisaje natural de 132 hectáreas que durante cien años sirvió como zona de entrenamiento militar, ahora bueyes, ponis, faisanes, liebres, corzos, murciélagos y abejas conviven con una fábrica que ya es neutral en carbono, pero sigue en su camino a convertirse en una "Fábrica de Impacto Cero". Su siguiente paso será convertirse en la encargada de la producción del próximo modelo 100% eléctrico de Porsche. Un nuevo Macan destinado a convertirse en el favorito de aquellos que buscan la deportividad sin renunciar a la versatilidad de un SUV.
Cuando el Porsche Macan se lanzó por primera vez en 2014 se convirtió en uno de los modelos más vendidos de la marca. No es de extrañar si pensamos en que es un vehículo para aquel que no está dispuesto a renunciar a nada. Las altas capacidades de un SUV unidas a la elegancia de Porsche y a la deportividad más pura, sello de identidad de cada uno de sus vehículos.
El Macan eléctrico se convertirá en el primer modelo completamente eléctrico de Porsche que se construirá en la planta de Leipzig, y comenzará su producción a finales de 2023. El compromiso hacia una movilidad sostenible no solo se refleja en este nuevo eléctrico, también en la propia planta que será, a largo plazo, una "Fábrica de Impacto Cero". En palabras de Sebastian Ganswindt, Responsable de Estructuras de Planta, el objetivo con el nuevo Macan es optimizar costes y procesos de producción. Por eso se mecanizan las operaciones, y se amplía el espacio y la zona para dar cabida al que será el próximo 100% eléctrico de Porsche.
Mejorando la entrega de baterías y el proceso mediante el cual el motor se une a la carrocería del coche, Porsche tiene la capacidad de “fabricar modelos de combustión, híbridos y el Macan totalmente eléctrico en una sola línea de montaje", en palabras del propio Ganswindt. Además, ya en 2021 se puso en marcha el programa de “Transformación de la Fuerza Laboral”, un proyecto con cursos de capacitación y reciclaje en todo el Grupo Porsche que ya es una de las mayores estrategias de habilitación en la historia de la compañía y que permitirá que la fabricación del nuevo eléctrico de la marca sea pan comido.
Si hablamos del nuevo 100% eléctrico de Porsche tenemos que hacerlo de la tecnología de 800 voltios de este nuevo SUV, que tendrá una potencia de 612 CV (450 kW) e incorporará un bloqueo de diferencial electrónico. Con un motor eléctrico en cada eje que permitirá una tracción total, su gran eficiencia en la gestión de energía y una autonomía de más de 500 km según los estándares de medición del ciclo WLTP, son una de las características más significativas de este nuevo Macan.
La carga rápida de 800 voltios, tecnología desarrollada por Porsche, permitirá al Macan cargar el 80% de su batería en sólo 15 minutos, gracias a la red de carga rápida que ya se expande por todo el mundo.
El diseño del nuevo Macan eléctrico será una evolución de su predecesor, con un perfil bajo y aerodinámico, un estilo muy deportivo que sigue la línea de todos los vehículos de Porsche y una parrilla delantera cerrada. Con un diseño enfocado en la tecnología y la innovación, el salpicadero contará con una gran pantalla táctil para que el conductor pueda controlar las funciones del vehículo y sacarle el máximo partido en todos los escenarios posibles. Porque si algo caracteriza al Macan es su versatilidad, cualidad innata que no perderá esta nueva versión eléctrica bajo ningún concepto.
Con una mayor distancia entre ejes que su predecesor, el Macan eléctrico tendrá un interior aún más espacioso especialmente en su parte trasera, algo especialmente interesante y que le convierte, si no lo era ya, en un vehículo pensado para toda la familia.
Con el objetivo de mantener la filosofía de diseño y la dinámica de conducción de Porsche, la fábrica de Leipzig se encargará del proceso de producción al completo, demostrando que deportividad, sostenibilidad y futuro pueden desarrollarse juntos si el proyecto lo firma Porsche.
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