Axl Rose, la excentricidad perfecta para el 918 Spyder

Bruce Bailey nació en 1962. Desde 1985 es el vocalista principal y único miembro permanente de la mítica banda de hard rock Guns N' Roses. Probablemente le conozcas por su nombre artístico, Axl Rose. Su fama, fortuna y buen gusto se materializan en su sweet child, un Porsche 918 Spyder que destila el rugido de su personalidad rebelde.

Axl Rose fue un niño del estado de Indiana. Cuando nació, su madre solo tenía 16 años, y su padre, unos años mayor, la abandonó cuando él era un bebé. Se crió como un adolescente rebelde y, como tantos soñadores, se mudó a Los Ángeles, donde asumió decenas de trabajos para estar cerca de la música hasta la fundación de Guns N' Roses.

La banda fue un éxito. Nadie se resistía a las potentes guitarras de los temas ni a la capacidad vocal de Axl. Y es que aunque al primer concierto de Guns N’ Roses solo acudieron dos asistentes, ahora acumula décadas de arrasar estadios, y la conocida publicación Rolling Stone l incluye al músico entre los 100 cantantes más grandes de la historia de la música.

A Axl se le conoce como un artista carismático, empeñado en que los conciertos salgan bien y en que sus fans se comporten cuando él está en el escenario. Aunque, todo hay que decirlo, el músico tiene un pequeño defecto: no es el maestro de la puntualidad. De hecho, llega un poco tarde a los conciertos y algunas de sus actuaciones comienzan con horas de retraso. Quizás por eso le venga tan bien contar con un 918 Spyder con el que llegar raudo y a tiempo al espectáculo.

¿Cómo reconocer el 918 Spyder? Es un superdeportivo que cuenta con motor central. Un biplaza concebido por el experto en diseño automobilístico Michael Mauer. Un híbrido con un toque exótico y una cabina futurista. Potente, con elevadas prestaciones y una velocidad de hasta 345 km/h. ¿El de Axl? Como no podría ser de otra forma, está customizado en negro mate para resaltar el alma de rock del artista. Imposible no reconocerlo. Una leyenda del rock necesita, al fin y al cabo, un coche de leyenda.

Escrito por: Javier del Campo