918 Spyder: el superdeportivo que vino del futuro

Ya desde sus inicios en el desarrollo de vehículos, el doctor Ferdinand Porsche pensaba en la inclusión de la electricidad para propulsar a sus coches. Siendo todavía muy joven, diseñó y fabricó el primer vehículo híbrido de la historia, el Lohner-Porsche Elektromobil. Por lo tanto desde Stuttgart se ha intentado continuar con este legado en la época actual. Y se está consiguiendo, ya que las aplicaciones de esta tecnología con futuro están a la orden de un día en el que los vehículos eléctricos o híbridos se pueden convertir en una opción apasionante de conducción.

Dado los tiempos en los que nos encontramos, era imprescindible la inclusión de los motores híbridos en los vehículos deportivos. Muchos amantes de este tipo de vehículos lo veían como una locura, o como algo que no iba a funcionar, incluso hace unos años se hubieran echado las manos a la cabeza. Pero Porsche logró todo lo contrario, popularizando su tecnología con el desarrollo desde Weissach, del vehículo concepto presentado en el salón del automóvil de Ginebra en 2011. Hablamos del Porsche 918 Spyder, todo un superdeportivo híbrido, que quizás sea un adelanto en la actualidad de cómo serán los deportivos en el futuro.

En un principio se pensó únicamente como un prototipo, pero finalmente se dió luz verde para su producción en serie, con limitación en el número de unidades. Este hermoso y respetuoso vehículo no podía quedarse únicamente en el museo de Porsche. Se lanzaron al mercado 918 unidades, que finalmente encontraron dueño en verano de 2015, cuando se vendió el último coche.

Una de las principales razones por las que se empezó a pensar en este vehículo, fue la reducción del consumo de combustible en los motores deportivos. De nuevo, Porsche consiguió que el 918 Spyder consuma aproximadamente 3.3 litros/100 km en un motor V8. Ello se debe precisamente a su funcionalidad de híbrido enchufable, con tres motores que permiten alcanzar la asombrosa cifra de 887 CV. Dos de ellos son eléctricos, mientras que el  central, es un V8 atmosférico de 4.6 litros y 607 CV. Los motores eléctricos además de recargarse enchufados a la corriente, se van recargando con la frenada progresiva del vehículo.

Pese a tratarse de un modelo híbrido, sus números son de película. Alcanza de 0 a 100 km/h en tan solo 2.8 segundos (el módulo eléctrico asociado a la tracción a las cuatro ruedas le permite obtener esa espléndida aceleración) y llega hasta los 340 km/h. Tanto es así, que en 2013, un 918 equipado con el paquete Weissach obtuvo un tiempo de 6:57 minutos en el circuito de Nürburgring, reduciendo en 14 segundos el anterior tiempo, y convirtiéndose en el primer automóvil de serie legal para circular por la calle que rebaja la barrera de los 7 minutos.

Otro detalle importante de nuestro 918 Spyder es la enorme influencia que tiene de la competición, siendo la experiencia de Porsche innegable y siendo también una de las marcas más laureadas de la historia. Su aerodinámica y materiales utilizados (fibras de carbono y polímeros reforzados) hacen de este modelo uno de los más ligeros pesando unos 1700 kg. Este supervehículo, además permite cinco modos de conducción, para adaptarse a distintos rendimientos, conductores y economía de combustible. Estos cinco modos se deben a las distintas combinaciones de los tres motores que comentábamos anteriormente.

Porsche consigue con el lanzamiento de este vehículo mejorar la aceptación social de los vehículos híbridos, pero sobre todo consigue que muchas personas se planteen o consideren la tecnología eléctrica como algo emocionante y no sólo respetuoso con el medio ambiente. Supone un punto de inflexión en la inclusión de esta tecnología en el mundo de altas prestaciones deportivas.