A los amantes más nostálgicos de los videojuegos de coches no se les puede haber...
Need For Speed Underground 2, la deportividad extrema
Need for Speed Underground 2 llegó en 2004. Combinando el elevado nivel de personalización con un buen diseño de las pistas, desafiaba a los oponentes en carreras de velocidad que ponía a prueba sus verdaderas capacidades a los mandos.
Uno de los grandes atractivos de la versión para consola de Need For Speed Underground 2 era, sin duda, el hecho de que podías personalizar tu coche a tu gusto, con varias opciones de esquemas de pintura, tintes de ventanas, llantas y accesorios.
Need For Speed Underground 2, más que una secuela
Need For Speed Underground 2 de Electronic Arts no correspondía al padrón “normal” de una secuela, por lo menos no en el sentido estricto de la palabra. Ambientado en una ciudad dividida en cinco partes, el centro urbano ficticio conocido como Bayview, era simplemente ideal para el imaginario de los amantes de las carreras de medianoche. Era un escenario abierto, grande y contaba con varios tipos de carreras.
Coal Harbor, City Core, Beacon Hill, Jackson Heights y el aeropuerto, todos ofrecían distintas opciones de conducción para los jugadores que buscaban la misma variedad de carreras que tenían en Need for Speed Underground. La diferencia era que se veían inmersos en una ciudad próspera. Beacon Hill, por ejemplo, era excelente para la conducción, mientras que City Core incluya un impresionante y extenso sistema de autopistas que conectaba toda la ciudad y ofrecía a los jugadores una excelente colección de carreras de aceleración y circuitos.
Para atravesar el enorme terreno de Bayview y cumplir con tu propósito tenías que hacer varias cosas, la primera de las cuales era correr: ganar carreras era la forma de hacerlo. Pero no se trataba solo de correr, sino de la forma en que progresabas. El juego te animaba a explorar sus muchos matices, a formar parte del "estilo de vida", y en muchos sentidos te recompensaba por hacerlo. Había dinero estratégicamente colocado esperando a ser recogido, unos pocos atajos y brillantes anillos de color que representaban oportunidades de carreras, garajes y más.
La forma para vencer era también bastante curiosa. Se basaba en ganar carreras, ganar dinero, ganar una reputación, y en la modificación de tu coche. Ganabas dinero ganando carreras, perdías dinero perdiendo carreras. Ganabas reputación ganando carreras con un gran margen entre tú y tu oponente en segundo lugar. Cuanto más reputación te ganabas, más patrocinadores tendrías, lo que significaba más coches gratis y más dinero.
Como detalle, decir que las actrices/modelos Brooke Burke y Kelly Brook eran los personajes para ayudaban a los jugadores, guiandolos a través de Bayview.
Velocidad y clase aseguradas
Por las calles de “Bayview” han desfilado una infinidad de modelos Porsche y que se han ido incorporando a lo largo de los años, desde los más clásicos como el Porsche 356a Speedster a los más veloces, como el Porsche 918 Spyder, que llega a la friolera de 345 km/h, el 911 GT2 RS con su motor de 620 CV y que puede alcanzar hasta los 330 km/h, a los más recientes y modernos, como el Porsche Taycan Turbo S. Este último llama especialmente la atención ya que no todo el mundo piensa en un coche eléctrico para disfrutar de la velocidad. Sin embargo, el Taycan Turbo S no sólo alcanza una buena velocidad, si no que cuenta con un overboost que le otorga una potencia momentánea de 560 kW y que dispara su rendimiento en la pista.
Escrito por: Iván Burgos Murillo
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