Conducir sobre el hielo es experimentar el automovilismo en su forma más pura. Una en la que la destreza del conductor y la ingeniería del vehículo se fusionan y combinan para superar los desafíos de este terreno.
La esencia Porsche también es garantizar la máxima calidad y perseverar en la excelencia.
No es la primera vez que Porsche gana en el DMT desde que compite. En la temporada 2022 el 911 consiguió tres victorias y cuatro podios adicionales.
El famoso poeta de la Antigua Roma Virgilio decía que “la fortuna está al lado de quien se atreve”. Era la época dorada del Imperio Romano, pero su reflexión sigue vigente y Porsche sabe de la importancia de atreverse. De arriesgar. De intentarlo con el único objetivo de conseguirlo.
Cuando Porsche decidió ampliar horizontes y colaborar en otros deportes además del tenis y el golf, vió que el kitesurf era una opción con muchísimas posibilidades. Un deporte extremo que es pura adrenalina y velocidad, como los deportivos en las carreras. Asfalto, olas o aire.
¿Casualidad o destino? En el caso de la colaboración entre Porsche y TAG Heuer parecía más culpa del segundo porque ambos comparten valores y amor por el automovilismo desde hace décadas. Estaban destinados a encontrarse.