El 11 de diciembre de 1935 nacía en Stuttgart Ferdinand Alexander Porsche. Hijo de Ferry Porsche y Dorothea, el pequeño vivió su infancia entre coches. Las oficinas de ingeniería y los talleres de desarrollo de su abuelo Ferdinand Porsche le inculcaron desde niño el amor por los automóviles.
Porsche Classic
No te vamos a descubrir que Mallorca es una maravilla, lo sabemos nosotros y los turistas que cada año visitan la Isla, pero no todos tienen la oportunidad de recorrer sus carreteras con un sonido delicioso, abordo de dos 911 SC 3.0 del 82.
En el año 1995 Porsche lanzaba su primer 911 GT2, un deportivo absolutamente salvaje solo apto para valientes. Se diseñaba bajo la premisa de que pudiera competir en GT2, para lo que era necesario que también pudiera circular por carretera.
Si buscáramos una experiencia de conducción única podríamos imaginarnos conduciendo un descapotable en alguna carretera sinuosa de la costa mientras cae la tarde. El sol acariciando la piel, el viento en la cara. Una imagen bucólica en la que las sensaciones se incrementan en cada curva.
A primera vista parece un coche post-apocalíptico, pero no. No se trata del tipo de vehículo que conduciría Tom Hardy en la película Mad Max: Road Fury.
Si hablamos de coches de Porsche, podemos enumerar vehículos que han cumplido, cumplen y cumplirán los sueños de miles de aficionados al mundo del motor.
La familia Klein tiene una relación especial con Porsche: Lea Klein ha hecho carrera en el automovilismo de competición, su hijo Julian se ha convertido en mecánico de Porsche, su hija Isabelle está entusiasmada con los rallies históricos.
Si existe un coche que define a Porsche es sin duda el 911. Un símbolo de todo lo conseguido que ya alcanza su octava generación con el 992, un ejemplo perfecto que resume los más de 70 años de historia de Porsche.
Helmut Bott nació el 18 de mayo de 1930 en Stuttgart, Alemania, y se unió a Porsche en 1956. Y aunque puede que le conozcas por su participación en el diseño, construcción y evolución de los Porsche 917, no fue su único hito en la marca.
Son más de una veintena los motores bóxer que han formado parte de la historia viva de Porsche en su 911. Lo que hace de este deportivo lo que es, no es solo su pulcra y cuidada apariencia, la elegancia de sus líneas o su cuidada fisonomía, sino lo que esconde bajo el capó.
En el año 1965 Porsche se propuso un objetivo que marcaría la historia del 911.
En 1965 llegó al mercado un modelo pensado para aquellos enamorados del Porsche 911 que no pudieran permitírselo. Una alternativa más económica y algo menos potente que se encontrara en una horquilla de precio entre el Porsche 356 clásico y el nuevo deportivo 911.